Los síntomas de la diabetes mellitus tipo 2 son tan variados como desagradables. Si nota alguno de los síntomas mencionados en esta publicación, sería aconsejable buscar atención médica. Por ejemplo, uno podría notar un aumento en la micción. Una característica distintiva de la diabetes tipo 2 es un nivel elevado de glucosa (azúcar) en la sangre. Cuando los niveles de glucosa en la sangre son altos, el riñón se esfuerza por filtrar el exceso de glucosa de la orina. Por lo tanto, la orina contiene más glucosa de la que debería, y esto conduce a volúmenes más altos de líquido que salen del cuerpo a través de la orina. Esto suele ir acompañado de un aumento de la sed. A veces, las pérdidas de líquidos de la orina son tan grandes que pueden conducir a la pérdida de peso. Para ser claros, desarrollar diabetes tipo 2 como una forma de perder peso es peligroso, desaconsejable y nunca debe perseguirse.
Además, la diabetes tipo 2 dificulta que los órganos del cuerpo reciban combustible dietético en forma de glucosa. Y cuando los órganos del cuerpo no obtienen la energía que necesitan para funcionar como deberían, esto puede provocar fatiga y hambre. La diabetes tipo 2 también dificulta que el cuerpo sane. Esto puede conducir a infecciones más frecuentes y heridas de curación lenta. Los niveles elevados de glucosa en sangre de la diabetes tipo 2 pueden provocar visión borrosa. La visión puede mejorar a medida que disminuyen los niveles de glucosa en sangre. Como si todo lo anterior no fuera suficiente, a veces la diabetes tipo 2 puede conducir a una deshidratación muy severa y un deterioro significativo de la capacidad de pensar y hablar con claridad. Y sí, si bien cualquiera de los síntomas anteriores justifica la búsqueda de atención médica, estos síntomas particularmente preocupantes justifican la búsqueda de atención médica de inmediato.
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Marzo 2020
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